Una de las características más destacadas de la polifacética tradición religiosa del hinduismo es la importancia extrema del culto a la diosa, que ha sido en la India mucho más abundante que en ninguna otra cultura. El hinduismo proporciona la más rica fuente mitológica y simbólica sobre los aspectos femeninos de la divinidad. Este libro trata de las principales diosas del hinduismo, de sus aspectos, leyendas y tradiciones. Se habla en él de Pârvatî, de Lakshmî, de Sarasvatî y de otras muchas diosas que enriquecen el inmenso panteón hindú. La obra incluye descripciones de los lugares sagrados, literatura devocional dedicada a las diosas y, sobre todo, describe la veneración de lo femenino, de la shakti, la energía de la que está compuesto el universo y que para los hindúes constituye un principio sagrado.